viernes, 25 de mayo de 2018

ESCUELA PRIMARIA ALENTEJANA


Encontré esta preciosa escuela en una de mis últimas incursiones por el Alentejo portugués.


Es uno de los más de siete mil edificios escolares construidos por Salazar, pese a quien pese, dentro del llamado Plano dos Centenários entre los años 1941 y 1969.
Ese período de tiempo, que abarcó algo más de un cuarto de siglo, posibilitó que todos los pueblos, aldeas y ciudades del país vecino contasen con una escuela de enseñanza primaria por lo menos.

Todas estas escuelas se construyeron con planos comunes para todo el país, dentro de un estilo llamado portugués suave, que participa de los elementos arquitectónicos de las edificaciones tradicionales lusas.
Cada escuela tiene un tamaño diferente según el número de alumnos que debía acoger, por eso las hay de dos, de cuatro o de seis aulas; todas tienen además baño, una zona de recreo cubierta y un gran espacio de juegos que, en algunos casos como éste, es el propio campo.


El éxodo del campo a la ciudad ha hecho que muchas zonas del interior se hayan despoblado, con lo que algunas de estas escuelas han quedado sin uso. Ésta, después de unos años sirviendo de centro medioambiental, ha quedado abandonada no hace mucho.