Está formada por media docena de casas y por la propia estación, separadas entre sí por algo más de un centenar de metros.
Delante de los edificios, aún puede verse la explanada de la playa de vías, que permitía en su momento que se cruzaran dos convoyes mineros, y lo que queda del cambio de vías.
Paradójicamente, la que fue una de las mayores estaciones del recorrido (junto a El Manzano, Las Cañas, Gadea y Niebla) es ahora el lugar donde comienza lo que queda del tendido ferroviario; hacia el sur las vías han desaparecido merced a la incansable labor de los desaprensivos y a la complicidad cobarde de las instituciones.
Solo turba el silencio el canto de algún pájaro y el sonido del agua del río Tinto deslizándose entre las piedras. Sin duda, lo poco frecuentado de este lugar da al paraje un punto de singularidad y belleza.
Las estaciones ferroviarias abandonadas son unas de las grandes olvidadas dentro de la despoblación en España. Muy poco se ha escrito sobre ellas, pero eran lugares plenos de vida como cualquier otro. La decadencia del tren trajo la muerte a todos estos lugares.
ResponderEliminarQue siga sin ser muy frecuentado el lugar porque se perdería el tremendo encanto que se ve que tiene. Si solo se oye el canto de los pájaros y el sonido del agua es buena señal (no hay mejor banda sonora).
Precioso reportaje amigo Antonio.
Un abrazo.
Amigo Faustino, sí que es buena compañía esa banda sonora. Los apeaderos y poblados que jalonan el recorrido de este antiguo tren minero están en ruinas y en el más absoluto olvido.
EliminarUn abrazo desde Huelva.
Querido Antonio, esta es la estación de Manantiales. La estación de las Cañas está unos kilómetros más arriba, en lo más recóndito del recorrido. No te la puedes perder.
ResponderEliminarhttp://tintolocos.blogspot.com.es/2008/04/estacin-de-las-caas.html
Tienes razón, Pepe, es Manantiales. En breve subiré la entrada de Las Cañas. Muchas gracias y un abrazo.
EliminarAhí vivieron mi familia materna, mis abuelos Toribio e Isabel, y mi tía María Antonia.
ResponderEliminarEntre la estación y las viviendas vivieron varias familias, al parecer hubo bastantes puntos intermedios en los 84 kms de tendido ferroviario para los trabajos de mantenimiento de vías. Un saludo.
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