domingo, 23 de julio de 2023

ÁGUILA DE LA COLUMNA SAGARDÍA

 


Llegamos mi compadre Ángel y yo hasta este lugar una mañana de mucha lluvia. Después de dejar el coche en el escaso arcén, subimos los maltrechos escalones y accedimos a esa parte de nuestra historia tan amada por unos y tan odiada por otros.


Este enorme monumento de mármol y hormigón representa un águila imperial justo antes de levantar el vuelo y fue construido aquí, en el norte de la provincia de Burgos, en honor al general Antonio Sagardía y a sus tropas, parte crucial del ejército sublevado en las batallas libradas en esta zona.




En enero de 1962, es decir, veintidós años después de la inauguración del monumento, se añadieron las inscripciones que aún pueden leerse en su basamento: el lema '¡Presenten! y una exhortación militar del general Sagardía en forma de poema pétreo.







domingo, 9 de julio de 2023

CASA DE LAS CULEBRAS

Encontrar esta casona en un islote en pleno centro del embalse de Alcántara fue toda una sorpresa. 



Mi hermano Pedro y yo habíamos venido hasta aquí para remar en nuestros kayaks Konero con la idea de echar un vistazo y hacer algunas fotos al puente romano de Alconétar, a la torre de Floripes y al misterioso cementerio de Talaván.


Sin embargo, al descubrir esta construcción sobre un pequeño islote en medio del embalse, no demasiado lejos de la torre de Floripes, decidimos acercarnos para verla desde cerca. 



Subir arriba y encontrar enormes nidos de aves colgando de sus muros, de los arbustos y del único árbol que crece en su maltrecho jardín, nos hizo bautizarla como casa de los cormoranes, aunque luego supimos que la gente de los pueblos cercanos la llama casa de las culebras o también casa encantada.



La construcción del embalse de Alcántara a principios de los años setenta hizo que esta vivienda, propiedad del vecino de Garrovillas don David Montero Rivero y ubicada en un montículo junto a la antigua carretera nacional, quedase aislada en medio de las aguas del pantano.

 

BEATERIO DE SAN ROMÁN

 

Recorriendo mi mujer y yo los extramuros de Medinaceli, descubrimos este extraño pero precioso edificio religioso, muy cerca del antiguo barrio judío.



Los estudios que existen sobre esta construcción y lo restos arquitectónicos hallados en su interior aseguran que se trata de un edificio cristiano levantado sobre una sinagoga.





A pesar del misterio de sus orígenes, se sabe que antes del siglo XVI era ya una parroquia y que en esa época pasó a ser un convento donde mujeres de varia condición convivían respetando sus propias reglas. Es en ese tiempo cuando pasa a denominarse beaterio.




Después de casi un siglo sin uso, su interior ha sido tomado por la naturaleza, lo que acentúa su aspecto de abandono y ruina.